viernes, 24 de abril de 2020

As xans II

Una vez que he compartido los pocos datos que recogí de viva voz, toca revisar la literatura que han generado los estudios sobre “as xans”. Pertenecientes a leyendas de la generación de nuestros padres y abuelos, aunque el origen se encuentra mucho más atrás, as xans son consideradas en Remuíño (A Arnoia) y Louredo (Cortegada) como “luciñas” (lucecitas) que se pueden aparecer cerca o lejos, aunque siempre manteniendo las distancias, de día o de noche, y que están relacionadas con la muerte, aunque verlas no signifique que vayas a morir. Ni me han hablado de apariciones antropomorfas, ni de procesiones, ni de maneras de defenderte de la aparición, ni de fenómenos relacionados con ellas. El tema lo comenté con familiares de San Xoán de Louredo y san Antón de Remuíño, además de haber escrito en varias páginas y redes sociales. Todo ello perseguía dar a conocer la leyenda y, contando con auditorio de estos mismos pueblos y cercanos, conseguir más detalles o admitir la ignorancia del tema. Las respuestas han sido muy escasas y las que han contestado han venido a ratificar lo anteriormente declarado. 

De esta forma, aquí quedan resumidas algunas notas características de la leyenda y, una vez más, ofrezco un texto al público para que pueda ser comentado. 
'La Santa Compaña. Fantasías reales. Realidades fantásticas', de Carmelo Lisón Tolosan

Hoy doy un paso más y echo un ojo a la red para ver qué se ha publicado sobre as xans. He de decir que la búsqueda realizada el miércoles 22 de abril de 2020 (en pleno confinamiento por la Covid 19) ha superado mis expectativas. Y es que se ha publicado más, mucho más, desde mi última búsqueda. Tocaba actualizar textos y es una gozada poder contar con nuevos recortes que comparar. En esta entrada os ofrezco algunos de la anterior busca y algunos de la actual. Así también podréis vosotros bucear en una leyenda escurridiza, aunque prácticamente homogénea en todos los autores. Para una tercer entrada quedarán los aportes que Miguel Mosquera Paans ha realizado en su ‘Lendas de Ourense’, de la editorial Cumio.

Todos los recortes y los datos conseguidos se han realizado desde buscadores generalistas y algunos particulares, como los de Galiciana, Hispana o la Biblioteca Digital Hispana. Es decir, que varias fuentes no las conseguiréis a menos que busquéis con calma y en páginas seleccionadas. En buscas generalistas están comenzando a aparecer muchos más resultados que hace un par de años, además que los formatos son diferentes, sin quedarse solo en el escrito. Por ejemplo, entre los resultados de búsqueda tenemos un corto y una canción.

Lo que suelen decir los diferentes autores ya aparece en el texto más antiguo que consulté: “Leendas e supersticiós d-Arnoya”, de Castor Sánchez García, en Nós : boletín mensual da cultura galega : órgao da Sociedade Galega de Pubricacións "Nós": Ano XV Número 119 - 15 novembro 1933. Básicamente, nos encontramos con las siguientes características: una procesión de ánimas de vivos, van en dos filas, llevan un ataúd (esa persona está próxima a morir), van de noche, aparecen en las encrucijadas (lugar de parada y oración con los difuntos). Si un amigo se encuentra con ellas no pasa nada o será desplazado del lugar, pero si es enemigo recibirá una paliza o será arrastrado inmisericordemente, cuando no irá a aparecer en el quinto pino.

Pero no faltan las diferencias, como cuando la aparición sí se ve, pero no se reconocen a los presentes. Otras veces as xans son una denominación distinta para las ánimas y las apariciones fantasmales. Y no faltan identificaciones con otros seres completamente diferentes: como cuando en Filgueira identifican xans con demonio. Un detalle más sobre Filgueira: solo allí encontramos una manera de librarse de las xans (que te raptan noche tras noche, al estilo de la Compaña) que consiste en tomar tierra de siete cementerios diferentes y metérsela en el bolsillo al cura mientras está consagrando (“al alzar”).

Sigamos con otras diferencias. Mientras que el artículo de Nós, con el testimonio de Juan Reibelo, perito agrícola, destaca que as xans se ven, aunque no se perciban, y el libro ‘La Santa Compaña’, de Carmelo Lisón, se recogen testimonios que hablan de ver las luces, la procesión y ciertos atuendos (sábana, campanillas), otros, como Víctor Vaqueiro, en su ‘Guía da Galiza máxica, mítica e lendaria’, dicen que as xans no se ven, sino que se perciben de alguna forma. El resto de los autores consultados ratifican que sí se ven, aunque no se sienta (quizás haciendo referencia a su incorporeidad y que no se detecta sonido alguno procedente de la comitiva). Así lo dejan por escrito Xesús Taboada en su ‘Etnografía Galega’ y Eladio Rodríguez en su ‘Diccionario enciclopédico gallego-castellano’.

As xans ('Galicia mágica', Vítor  Vaqueiro)
¿Quién conforma la procesión? Ánimas de vivos, transportando en ataúd a quien ya está próximo a morir. Según estén más cerca del ataúd más pronto morirán. Sin embargo, tanto el artículo de Nós como el libro de Víctor Vaqueiro dicen que la conforman personas con un deficiencia en la administración de su bautismo: o los padrinos proclamaron mal el Credo o el sacerdote le ungió con el óleo de los enfermos (entonces denominado, de la extrema unción). Es decir, que la procesión solo iría formada por mal bautizados a punto de morir. Poco número sería, entonces. Yo me pregunto si no estaremos ante un error tipográfico en el fundacional artículo de Nós: debería poner “ven” y no “van”. 

Detalle que Vaqueiro copiaría (tanto en su edición gallega como castellana repite lo mismo: que la procesión se conforma de mal bautizados). Sin embargo, esto cuadra mal con lo que ambos escriben a continuación. Y es que puedes dejar la procesión de as xans siendo bautizado de nuevo. Lo que significa que, con el nuevo bautismo te librarías de morir en breve… Personalmente, creo que la versión original es la de ver: solo ves la comitiva si te han bautizado mal. Si quieres dejar de verla, te bautizan de nuevo, poniendo especial énfasis en que se proclame el Credo perfectamente y se usen los óleos debidos. El diccionario de Eladio Rodríguez está en esta línea: el mal bautizado es quien las ve, por eso apenas hay quien vea as xans. También estaría en línea con lo que dicen vecinos de Louredo y Remuíño. Existe la creencia de que quien ha sido bautizado con el óleo de la extrema unción (no se menciona nada el tema del Credo mal recitado) va a ver a las ánimas, a los difuntos, o podría haber quien sepa quién va a morir en breve.

Con el tema de ver hay disparidad: unos recogen la tradición de que los videntes están mal bautizados y otros asimilan la experiencia con las ánimas, visibles para cualquiera que se cruce con ellas, tal como pasa con la compaña.

- Enlaces:
1 http://leoeosseus.blogspot.com/2010/01/terra-das-xans.html

2 https://galiciaencantada.com/lenda.asp?cat=50&id=2420

3 https://gl.wikipedia.org/wiki/Xans

4 https://themurostimes.com/2015/09/21/contos-de-muros-o-home-que-via-as-xans/
 

domingo, 19 de abril de 2020

El Resucitado de A Armada

FELIZ PASCUA.

No sé si sabes de muchas imágenes como la que acompaña estas líneas. La verdad es que yo ni las conozco ni veo que se prodiguen. Generalmente, acostumbro a ver cruces o crucificados, pero pocos resucitados en "terreno sagrado". No llevo la cuenta ni lo he investigado, pero a ver si va a ser que hay más resucitados en los museos que en las iglesias católicas. Si la vida cristiana no es comprensible sino desde la óptica de la resurrección de Cristo, debería hacerse notar más. Claro, también entiendes que se quiera reflejar más la humanidad sufriente o que los artistas no tengan muchas ganas de innovar, pero el tema de la resurrección bien daría para una investigación y posterior plasmación, no solo para el disfrute artístico, sino para acompañar en el templo.

Una frase que nos repetían a menudo era la de que no podía existir cruz sin Cristo ni Cristo sin cruz, manifestando que era la misma persona la que murió en la cruz que la que fue resucitada (sí, generalmente, se dice que resucitó, pero podríamos hablar de la conveniencia de decir que fue resucitado por el padre con el poder dinámico del Don, del Espíritu). Y eso que la cruz fue motivo de escándalo para propios y extraños durante bastante tiempo. Según el  historiador Federico Romero Díaz y del biblista Javier Alonso López, el primer crucificado representado (en relación con Jesús) fue un asno. Sí, el asno con el que pretendían mofarse de Alexámenos y sus creencias religiosas (a menos que sea una representación de un orante gnóstico). La cruz ya disfrutaba de adoración antes de los cristianos y pasó por diferentes representaciones una vez que la Iglesia la asumió. Para esta historia, te recomiendo el breve trabajo 'La crucifixión' de Laura Rodríguez Peinado.

'La crucifixión' de Laura Rodríguez Peinado (fragmento)
La imagen que traigo a esta sala de notas es la que está presente en el multifunciones de A Armada, en el ayuntamiento de Celanova, Ourense. Es una preciosa imagen del Resucitado sobre el mundo, saliendo de la cruz. Una cruz que sirve de fondo a la escena de un Cristo dinámico, en posición de caminar (¿Saliendo del sepulcro, ascendiendo al Padre?). Se sitúa al fondo, por encima del sagrario, sobre un ventanal que conforma un curioso retablo que mira a la naturaleza y los pueblos de la contorna. Como escribí, es un espacio multifuncional, de una sola nave, con dos filas de columnas en los laterales, lo que puede llevar a percibir el espacio con una división triple: zona central amplia y dos pasillos laterales, entre las paredes y las columnas. Se dedica, principalmente, como iglesia, gracias a la amplitud de la que dispone y de la zona dedicada a sacristía, entrando a la izquierda (zona independiente, separada con una puerta).
 
Se localiza en una zona acotada, con el nombre genérico de santuario de A Armada, conformado por este edificio multifuniones, con su zona inferior dedicada a ocio, zona verde, gruta-capilla con cascada de agua, capilla de la Virgen (advocaciones de A Armada y Da Cabeza) y capilla para las confesiones, entre otras. El día de su fiesta grande es el 9 de septiembre, precedida de novena. Ser es la fiesta de la natividad de la Virgen María, pero no sé en qué momento la trasladaron del 8 al 9, de modo que así puede reunir sacerdotes y pueblo sin problema (ya que todos la celebraron el día propio y aquí, por funcionalidad, la celebran al siguiente). Esto no quita para que acuda hasta el obispo de la diócesis, apoyando así un curioso cambio de día (¿Qué le parecerá al delegado de liturgia?). Esa mañana de celebración contempla confesiones, visita a la capilla original, Misas en la gruta, venta de recuerdos y objetos religiosos (fuera del recinto), "fiesta pagana" y procesión con música, siendo la guinda del pastel la Misa de mediodía. No sé actualmente, pero el anterior rector, inventor y esforzado trabajador por el lugar, aportaba una nota cultural al encuentro religioso y festivo: la entrega de premios a los ganadores de un concurso literario. Vi varias publicaciones donde se recogían estos poemas y narraciones, que llevaban el nombre de A Armada por España adelante (se presentaba gente de muchos lugares fuera de Galicia).

Recupero esta foto en el II Domingo de Pascua, recordando las veces que estuve en el lugar, amén del magnífico trato del difunto don Manuel Rodríguez Seguín, rector del santuario. El día de fiesta abría las puertas de su casa y allí comían familiares, amigos, gente de sus parroquias y los curas que habían acompañado en A Armada. Fue también promotor de una idea que se me ocurrió y que, al menos tres años, no sé ahora, reunía a las parroquias de la zona para celebrar allí la Vigilia Pascual. Un precioso trabajo que le daba un aire único a la celebración y la vivencia cristiana, conjugando un momento de encuentro informal, otro de participación litúrgica y un tercero de cena compartida. Buenos recuerdos, sí.

Y bien, ¿conoces otros resucitados como este?

sábado, 18 de abril de 2020

Fanzine '2000 maniacos' número 46

Todavía noto el olor a cadaverina, formol y ozono de la lectura del 2000 maníacos del pasado verano. Un empache de los guapos recorriendo todas las sendas que la criatura de Frankenstein pisó. Ahora me saco de hemeroteca para disfrutar otro número de la publicación. Y la portada es de las de impacto. Si no, fíjese usted en tremenda boca se gasta el tiburón. 

Letras grandotas en blanco y negro sobre fondo sanguinolento. Despliego su contenido para ver dónde nos recomienda pasar las estivales horas de asueto. La entrega del verano de 2014, el número 46 del fanzine, trae imagen y texto para recorrer nuevos títulos y conocer otros países. ¿Qué las vacaciones son la época propicia para viajar? Pues este número te llevará por el mundo sin salir de casa. 

Sin ir más lejos, déjate conducir al exótico ambiente del cine paquistaní. Para mí fue todo un descubrimiento y uno de los motivos por los que elegí comprar esta entrega. Poco después de abrirla, ya me encontraba rodeado de un sinfín de propuestas locas, ambientes marginales, pastiches de películas conocidas y un remolino abyecto de argumentos a cada cual más admirable. Como manda(ba)n los cánones escolásticos, al inicio se deja claro de qué vamos a tratar y bajo qué términos. Nada mejor que un sencillo diccionario donde se destripan los conceptos básicos. El tufillo sangriento hará salivar a más de uno. Pero no todo va ser hablar de tripas, hay que verlas, por lo que pasamos a las 10 películas básicas que le dan cuerpo al terror, hasta ahora, presentado. Desde su particular versión de Drácula en blanco y negro ('Zinda Laash') hasta la de Catwoman ('Da Khwar Lasme Sporgmay'), pasando por una hilarante y desvergonzada versión de 'Las mil y una noches' ('Jadu Nagri').

¿No has gozado suficiente y quieres ir más al interior de la cuestión? Pues, ¡venga!, saquémonos de burka y gore para conocer al director Omar Alí Khan y su rompedora 'Zibahkhana'. De sus influencias nos cuenta que La mayor es 'La matanza de Texas'. Tiene situaciones muy parecidas. Si alguien compara mi película con la de Tobe Hooper es todo un honor. De este archivo paquistaní no me suena ni la primera, así que me ha valido la pena la compra para ampliar perspectivas y títulos. ¡El terror no sabe de fronteras! Regresamos a terreno patrio para una entrevista a la bella musa María Kosty. Nos enteramos de su primera peli, 'El paseíllo', de sus no dificultades para desnudarse ante las cámaras y de la leche que se pegó Bárbara Rey en el primer día de rodaje de 'La noche de los brujos'. Y eso es solo el principio, pero ya suficiente como para afilar colmillos, ¿no? 

Salimos de nuestras fronteras y atacamos el precioso reportaje sobre Tod Browning. ¡Qué maravilla de selección gráfica! Amplia es, también, la entrevista a "Gomio", estoooooo, a George Eastman, con declaraciones como: "La escena del feto de 'Antropophagus' me resulta divertida, pero la película nunca me ha gustado". Pues, ojete, que es solo una de las varias actuaciones que nos comenta... y destripa. No he llegado todavía a la mitad del fanzine y aún nos queda material para rato largo: los superhéroes ibéricos de cromos y tebeos, cartelera selecta de chicas de calendario, repaso al cine de tiburones come personas (¡hasta por desiertos y nieve hacen su fatal aparición!) y un tramo final de lo más caliente, obsceno, sangrante y descabezado. 

Venga, venga, pilla el fanzine y cambia de dinámica, que esto trae rastro de sangre para rato. No huyas e híncale el diente, que en tiempos de cuarentena no hay más para donde ir. Si quieres conocer parte de los contenidos de su número 38, ¡¡sigue leyendo!! Y también te repaso el número 51.

viernes, 10 de abril de 2020

Los placeres del infierno en Hellraiser

Acabo de ver 'Hellraiser VII: Deader', dirigida por Rick Bota, 2005. Hasta ahora, la que mejor me muestra ese infierno que, desde las primeras entregas, promete placeres extremos. Esos placeres parecían referidos al dolor, pues tenemos múltilpes casos en los que la víctima es descuartizada o atravesada por ganchos y cadenas. Las mismas primeras imágenes daban la impresión de una mazmorra repleta de esos elementos, los cuales producían una estremecedora harmonía de metales en contacto. Hasta los demonios cenobitas visten atuendos, complementados con diferentes afiches, donde el dolor es el protagonista, con una apariencia propia del mundo sadomaso extremo.


Dolor y placer, como dos caras de la misma moneda. Pensaba que lo del placer era la forma de atraer incautos que abriesen la caja, atrayendo a los cenobitas, que se darían un buen banquete con el cuerpo y el alma del sujeto de turno. Sin embargo, mientras las imágenes nos reducían la vida infernal al dolor físico, el discurso del placer seguía presente en las consecutivas entregas. Contando con que la promesa del placer fuese un engaño, cabía la posibilidad de que en el dolor es donde encontrarías placer. Sin embargo, cuantos pudieron salir de la dimensión infernal nos dejaron un testimonio de locura. Si podían, huían de Pinhead y sus lacayos.

En 'Hellraiser IV: Bloodline' nos daban un nuevo dato, ampliando las opciones de conocer esa dimensión de los cenobitas. Una de ellos lleva unos siglos en la Tierra, viviendo tan ricamente bajo la apariencia de una bella mujer. Cuando llega Pinhead, este le recuerda que antes tenían otro estilo de actuar, que la seducción ya no forma parte de su juego, que ahora se muestran tan cual son. Esto parece refrendar la idea de que las historias de placeres extremos era una milonga para que resolvieses el puzzle de la caja y tu alma pasase a una existencia solo de dolor. Aunque, vamos, la existencia terrena de la cenobita a la que Pinhead llama repetidamente "princesa", era la de una vividora, entregada a sibaríticos placeres físicos.

Que unas cadenas surjan de pronto y que ganchos terribles rajen tu piel, una vez que logras abrir la caja, era el inicio de una vivencia extrema de dolor. Pero 'Hellraiser V: Inferno' ya nos introduce en una nueva tesitura: el dolor no se reduce al físico, la existencia en la dimensión infernal es un eco de la previa existencia humana y del estilo particular de quien ha entregado su alma a los cenobitas. El infierno se nos muestra en una renovada imagen que incluye el sufrimiento psicológico y global de la persona. Se traduce en la repetición, o el regreso (por aquello de que, al final, te das cuenta de que algo no cuadra y tomas conciencia de tu situación), al peor día de tu vida o al más cargado de maldad, cercano en el tiempo a la apertura de la caja. 

Este infierno de corte cíclico, donde caben variaciones, pero no una salida o una resolución de la situación dolorosa, es parecido al infierno que después nos mostrarían en la serie 'Predicador'. Son infiernos similares en cuanto que repiten un día de tu vida, jornada cargada de maldad o dolor, que supuso un cambio en tu continuo existir y del que no puedes salir. Esto último es relativo, porque hemos visto en las primeras entregas que sí hay quien logra reincorporarse a la Tierra (aunque los cenobitas pronto salen a perseguirle) y hasta hay dos chicas, en tres entregas diferentes, que dan esquinazo a Pinhead y los suyos, o mediante un trato o con un suicidio. La naturaleza del lugar difiere: mientras que en 'Preacher' es una cárcel subterránea donde los presos tienen ratos de descanso y su tortura es una simulación que depende de corriente eléctrica para funcionar, en 'Hellraiser' es un mundo o un ámbito real.


'Hellraiser VII: Deader' aportará otra novedad: sí es posible el placer en esta dimensión infernal. Aunque muertos, parte de su discurrir infernal es en su forma humana, donde pueden gozar de la carne. Aunque llega un momento en que se muestra su estado difunto, el modo en que murieron, sus heridas. El papel de la protagonista, la periodista Ami Klein, va a sintetizar esa imagen de sufrimiento físico y psíquico, con continuas escenas de gritos, expresiones de dolor y la herida sangrante que, una y otra vez, volverá a abrirse en su pecho. Los personajes que gozan en el último metro sintetizan la imagen de placer físico, entregados al sexo y las drogas, aunque acaben desvelando su aspecto funerario después.

jueves, 2 de abril de 2020

Dous retos culturais para un tempo de confinamento

Seguimos en confinamento pola Covid-19 e seguro que fomos recibindo máis dun reto ou proposta para aproveitar o tempo en casa. Eu non son de seguilos, pero si que respondín a dúas chamadas moi concretas, que ben equivalen a dous retos. Compártovolas, por se ti tamén te animas e deixas unha pegada na cultura galega, tan necesitada de coñecemento e expansión. 

Nesta época de información e creación de contidos, hai dous espacios nos que, de maneira sinxela, podemos aportar unha liña á nosa historia. Porque non, nin está todo escrito nin en Internet está todo. Ademais, son dous campos nos que os aportes poden ser de cutura xeral ou comentados con profundidade. É dicir, podemos participar co moito ou pouco que saibamos e que  atopemos. Haberá que aproveitar a publicidade que estes días chega de tantas plataformas onde a cultura se nos pon ó alcance dun clic e de maneira gratuíta, non si? Ademais, este tempo no que sentimos máis cerca ós que temos lonxe podemos aproveitalo en preguntar e escoitar historias que nos reconecten cas nosas raíces, facendo resume delas despois e partillándoas co resto do mundo. Imos ver dúas formas sinxelas, efectivas e con pegada para o futuro.


A primeira fai referencia ós topónimos da nosa terra. Inda é hoxe que se seguen a recoller e estudiar, pois tense conciencia de que falta moito terreo por descubrir. Con esa perspectiva nace Galicia Nomeada, un potente proxecto onde podemos descubrir e aportar topónimos galegos. Hai dúas vías complementarias para facelo: vía en liña ou por aplicación para móbil. E digo complementarias, porque a experiencia e a recomendación dalgún dos responsables suxire o uso conxunto. Co móbil: sacar fotos, apuntar o topónimo e clasificalo, gravarnos a nós ou outros pronunciando claramente o mesmo, gardar o borrador e ir a por outro. Dende a páxina web: aportar máis documentación, historias ou datos sobre o borrador, delimitar o topónimo a un edificio ou lugar, recoller bibliografía ou outras páxinas na que apareza e, finalmente, enviar o borrador con tódolos datos que poidamos.

Para comezar a usar esta ferramenta só temos que ir á web ou buscar a app e rexistrarnos. Mandarannos un correo para rematar o proceso e un manual de uso. Lédeo con calma, que é breve e moi explicativo. Logo te fas con el. A continuación, comezar cun topónimo, xeolocalizándoo, estando no lugar ou buscándoo no mapa inicial. Explora con calma as diferentes opcións de clasificación e garda todo como borrador. Esto axudarache en dous campos: poder modificar todo con calma e non recibir tantos correos. Porque si, con cada aportación ou modificación recibiremos un correo electrónico, así que, mellor, escribir e gardar como borrador para que, cando estemos seguros, envialo. Desde a web sempre poderás volver buscalo e ampliar ou modificar información.

 Podes facer fotos no lugar ou subilas desde a carpeta onde as teñas, tanto de móbil como de pc. Tamén podes gravar a pronunciación ou escribila foneticamente. Para aportar vídeos terás que subilos a algunha plataforma e, no cadro de escribir, dentro da ficha de cada topónimo, compartir unha ligazón. Este cadro para escribir é ben importante, porque podes convertilo nunha ficha descriptiva ampla, cas túas palabras e con ligazóns. Por exemplo, nestes días eu uso varias páxinas diferentes para aportar información a maiores. Non só tiro dos meus álbumes de fotos de Facebook e Flickr, senón que busquei o álbum do usuario Rafaeliux e o PXOM do concello de Cortegada. As fontes poderían ampliarse, pois san Xoán de Louredo ten presenza en Facebook e Instagram, ademais de aparecer nalgunha que outra bitácora. A idea é que uses ese cadro de escritura, na ficha de Galicia Nomeada, para pegar esas ligazóns. No cadro podes expresarte para describir ou descubrir o topónimo e calquera nota de interese. Por exemplo, onte fixen un descubrimento en Internet Archive, cando vin varios audios das campás de Cortegada. Pois ben, hoxe, cando abra sesión en Galicia Nomeada, irei á ficha da igrexa de santa María de Cortegada, Ourense, e deixarei constancia desa ligazón no cadro de descripción.

O segundo reto cultural fai referencia a un elemento que seguro temos moi visto, inda que non mellor valorado. Trátase dos cruceiros que, como os topónimos, non están debidamente recollidos e coñecidos na súa ampla distribución polo noso territorio. En concreto, podemos facer dúas cousas, en orde a completar a información que hai sobre elas e actualizar o catálogo que move Fernando Ávila. Dúas vías se abren neste caso para que poidamos participar, aportar e sacar da escura ignorancia ós usuarios interesados.


En primeiro lugar, coñecendo a páxina Cruceiros de Galicia, onde veremos que podemos localizar os cruceiros, pero tamén podemos dar a coñecer os que faltan. E non só de Galicia! Non deixedes de furgar pola web adiante, porque terás un amplo catálogo de construccións e unha biblioteca dixital moi interesante. E iso é o principio! Usa os comentarios para ampliar información e as canles de comunicación co administrador para dar noticia dos que falten.

Tamén os podes compartir, participando no grupo de Facebook, onde se rexistran novos aportes a diario, xa sexa en forma de fotos vellas ou actuais, xa como documentos onde se rexistraron cruceiros, sen esquecer cadros ou películas onde aparecen. Actualmente, o administrador está a realizar unha interesante labor, ca que conta con nós: localizar o PXOM dun concello, copiar a ligazón e o número ou código dos cruceiros, e porlle os datos na caixa de comentarios da súa web. Abrimos os PXOM, por exemplo, usando SIOTUGA, abrimos a web de Cruceiros de Galicia e, en cada ficha, comentamos o que atopamos, xunto ca ligazón á páxina que nos interese do PXOM. Como non, esto é un aporte concreto que se pode enriquecer co que nós saibamos ou con outras ligazóns. Se se refiren a cruceiros concretos imos copiando esas informacións en forma de comentario a cada un deles, se é información xeral, podemos enviarlla ó administrador para que a colgue na sección de biblioteca.

Corren bos tempos para estes dous retos culturais, non si? E ti, xa compartiches o que sabes?

miércoles, 1 de abril de 2020

Sementando patacas en san Xoán de Louredo 2020

Estercando e colocando as patacas cortadas
Despois de dous días de calor e no medio de mil noticias sobre a pandemia coronavírica do momento, tocou sementar as patacas en Louredo. A lúa está en minguante e a xornada comezou cunha mañá de ceos alternantes entre as nubes e os claros. Ó sol ben se notaba calor, pero a brisa corría e cada pouco chegaba unha nube que traía sombra e un descenso notable da temperatura. 

A terra estaba lista: herba cortada, un pío queimado, o esterco en varias medas e as patacas cortadas pola metade, cun ollo, alomenos, asomando. Os milleiros secos (nós dicímoslle "palla" ou "palla do millo") xa foran cortados e dispostos nunha confección cónica. É unha maneira elegante de telos recollidos, sen que ocupen moito terreo e fáciles de destruír cando chega o momento. Sempre que o tempo o permita, antes de sementeira algunha, préndeselles lume. A poder ser nunha mañá fría de néboa e tendo ollo deles. Xa che hai ben anos que non vexo arder un! E pa levantalos hai que ter tino e saber. 
Xoaniñas nos terreos colindantes
Como o terreo para as patacas foi terreo do millo (alternancia de cultivos, anual) case sempre vas atopar inda as duras raíces secas, xeralmente ben aferradas á terra, facendo terróns que debes desfacer antes de enterrar de novo. Primeiro raspamos o terreo e pasamos a cavadora, axilizando o traballo. Esa terra removida sáchase, elevando un muriño e afondando un rego. Comezamos de novo: raspamos o  terreo e botamos esa terra, herbas e raíces do millo no rego. A continuación, repartimos o esterco. Un vello dito di que hai que repartirlo polo rego tal como repartiriamos os cartos. A cousa vén dos anos en que pouco esterco había no pobo para botar, tendo necesidade de repartilo ben e que chegase para toda a plantación. Os mesmos montes non daban moito estrume, pois solían estar limpos, non todos tiñan árbores e moito gando andaba neles. Ben, repartido o esterco (como se estiveramos repartindo os cartos), procuramos que vaia ben solto e non en bloques compactos. Bótase o mineral, esparexéndoo con ollo, e colócanse as metades de pataca na ladeira que forma a terra antes removida, a que forma un muriño. Séguese co paso da cavadora sobre o terreo raspado, cavar un novo rego, elevar novo muriño-ladeira e o mesmo proceso ata rematar. Cada dous regos é tradición plantar unha berza nun dos extremos. 

Mentres van medrando, cómense as patacas do ano pasado, recollidas e xuntadas en medas, en sitio fresco e escuro. Patacas que se limpan cando "están saídas", e os ollos brancos se volven raíces, elevándose ou estendéndose varios centímetros. Limpeza que sempre se debe facer en minguante. A mesma fase que se escolleu para esta sementeira, "para que non se lle vaia toda a forza pas ramas". Igualmente, foi a tarde escollida para embotellar. Sóese buscar un día de minguante, con tempo claro e calmo, de sol. Non pode estar de chuvia nin, moito menos, de tormenta. Crese que se o tempo está revolto o viño tamén o estará e non se pode embotellar así.